Los ambientes ATEX (Atmósferas Explosivas) son áreas donde existe riesgo de explosión debido a la presencia de sustancias inflamables como gases, vapores, nieblas o polvos. Estas zonas se clasifican según la frecuencia y duración de la presencia de atmósferas explosivas.
La normativa ATEX busca prevenir accidentes mediante el uso de equipos certificados y medidas de seguridad adecuadas.
Es fundamental identificar correctamente estas zonas en entornos industriales para proteger a los trabajadores y las instalaciones.
- Industria química y petroquímica: Procesamiento de productos químicos, refinerías, almacenamiento de combustibles.
- Plantas de tratamiento de aguas residuales: Presencia de gases como metano o sulfuro de hidrógeno.
- Industria farmacéutica: Uso de solventes volátiles en la producción.
- Industria alimentaria: Procesamiento de harinas, azúcar o leche en polvo, que pueden generar polvo explosivo.
- Industria minera: Presencia de gases inflamables y polvo de carbón.
- Plantas de biogás: Generación y almacenamiento de metano.
- Industria de pinturas y barnices: Uso de disolventes inflamables.
- Almacenamiento y distribución de combustibles: Estaciones de servicio, depósitos y terminales.
- Buques y astilleros: manipulación de sustancias inflamables y los entornos cerrados donde pueden generarse atmósferas explosivas.
- Cervecerías y destilerías: emisión de vapores inflamables, fermentación y almacenamiento….