Las mascarillas filtrantes ofrecen protección para partículas, y aerosoles sólidos y líquidos, bajo la norma EN149 y pertenecen a la categoría III.
Para determinar la selección de la mascarilla es precio conocer: el contaminante, su concentración y su toxicidad.
Se clasifican en función a la clase de protección:
Protección FFP1:
Para partículas de baja toxicidad en bajas concentraciones. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 4,5. (Concentración permitida en el ambiente de 4XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas nocivas como madera (serrín…), agricultura, minería, construcción, limpieza polvo….
2288-M10 MASCARILLA DESECHABLE FFP1
2288-M12 MASCARILLA DESECHABLE FFP1 con válvula de exhalación
Protección FFP2:
Para partículas de media toxicidad. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 12. (Concentración permitida en el ambiente 12XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas de baja toxicidad como madera, agricultura, minería, construcción, fundición, fabricación con metal, productos químicos y aditivos en polvo, alimentación, cerámica, astilleros….
2288-M20 MASCARILLA DESECHABLE FFP2
2288-M22 MASCARILLA DESECHABLE FFP2 con válvula de exhalación
Protección FFP3:
Para partículas de alta toxicidad en alta concentraciones. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 50. (Concentración permitida en el ambiente 50XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas toxicas como amianto (asbesto), fibras tóxicas, madera, productos fitosanitarios, minería, construcción, fundición, soldadura, fabricación con metales, industria farmacéutica, productos químicos y aditivos en polvo tóxicos, alimentación, piscifactorías, cerámica, astilleros, agricultura y ganadería, riesgos biológicos (virus, bacterias….)
2288-M32 MASCARILLA DESECHABLE FFP3 con válvula de exhalación
*FPN (Factor de Protección Nominal): La relación entre la concentración de un contaminante en el ambiente y su posible concentración en el interior de la mascarilla. Se calcula a partir del valor de máxima fuga interna permitida (%), el cual se obtiene para cualquier equipo a partir de un ensayo normalizado EN.