Las mascarillas filtrantes ofrecen protección para partículas, y aerosoles sólidos y líquidos, bajo la norma EN149 y pertenecen a la categoría III.
Para determinar la selección de la mascarilla es precio conocer: el contaminante, su concentración y su toxicidad.
Se clasifican en función a la clase de protección:
Protección FFP1:
Para partículas de baja toxicidad en bajas concentraciones. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 4,5. (Concentración permitida en el ambiente de 4XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas nocivas como madera (serrín…), agricultura, minería, construcción, limpieza polvo….
Para partículas de media toxicidad. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 12. (Concentración permitida en el ambiente 12XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas de baja toxicidad como madera, agricultura, minería, construcción, fundición, fabricación con metal, productos químicos y aditivos en polvo, alimentación, cerámica, astilleros….
Para partículas de alta toxicidad en alta concentraciones. Con un Factor de Protección Nominal (FPN)* de 50. (Concentración permitida en el ambiente 50XTLV)
Especial para trabajos donde se realizan actividades con partículas toxicas como amianto (asbesto), fibras tóxicas, madera, productos fitosanitarios, minería, construcción, fundición, soldadura, fabricación con metales, industria farmacéutica, productos químicos y aditivos en polvo tóxicos, alimentación, piscifactorías, cerámica, astilleros, agricultura y ganadería, riesgos biológicos (virus, bacterias….)
*FPN (Factor de Protección Nominal): La relación entre la concentración de un contaminante en el ambiente y su posible concentración en el interior de la mascarilla. Se calcula a partir del valor de máxima fuga interna permitida (%), el cual se obtiene para cualquier equipo a partir de un ensayo normalizado EN.
El riesgo eléctrico constituye uno de los riesgos laborales más comunes por estar presente en casi todas las actividades laborales.
La definición de Riesgo eléctrico según el Insht, es todo riesgo originado por la energía eléctrica. Quedando incluidos los siguientes riesgos:
Choque eléctrico por contacto con elementos en tensión por contacto eléctrico directo o indirecto.
Quemaduras a consecuencia de un arco eléctrico provocado por un cortocircuito. Arco eléctrico es cuando la corriente eléctrica salta de un elemento conductor en tensión a otro, o simplemente al suelo.
Caídas o golpes como consecuencia de choque o arco eléctrico.
Explosiones por la acumulación de cargas electrostáticas generando atmósferas explosivas.
Los ambientes ATEX (Atmósferas Explosivas)en ambientes clasificados como ATEX es necesario como mínimo, el uso de Ropa Ignífuga (EN11612) y Antiestática (EN1149-5). Otras normas como la protección contra el Arco Eléctrico (EN61482) amplían el espectro de uso y refuerzan la seguridad del trabajador en caso de que se produzca un Arco Eléctrico, y son cada vez más necesarias dependiendo de la tarea a realizar.
Riesgo eléctrico y normativas
A continuación, detallamos los Equipos de Protección individual (EPIs) que deben utilizarse en este tipo de trabajos y la normativa que se aplica a cada uno de ellos.
Protección de la cabeza
La labor principal del casco de protección es de proteger frente a choques o impactos, pero cuando estamos desempeñando trabajos con riesgo eléctrico, tenemos que tener en cuenta que además tiene que protegernos del paso de la corriente eléctrica al cuerpo del trabajador a través de la cabeza.
Pantallas faciales contra el arco eléctrico de cortocircuito. Deben tener un espesor mínimo de 1,2mm, una altura de visión libre en sentido vertical de 150 mm. como mínimo y una clase de protección de 2-1,2 o 3-1,2. El número 8 es el símbolo de marcado que indica la solidez frente al arco eléctrico de cortocircuito.
**Solo el calzado fabricado íntegramente con polímeros (Clase 2), tipo bota de agua, garantiza el aislamiento eléctrico según la única norma de riesgo eléctrico en la actualidad. El calzado de seguridad de piel o microfibra, aunque sea Metal Free no debe usarse como calzado eléctricamente aislante**
Tenemos que diferenciar dos grupos de calzado según Asepal:
Calzado aislante de la electricidad (EN 50321)
Calzado destinado a ofrecer una gran resistencia eléctrica, por lo que evita que la corriente penetre al cuerpo del usuario. Destinado para trabajos en instalaciones de baja tensión. Este tipo de calzado es un EPI de Categoría III.
Se distinguen dos clases que indican el valor de tensión máxima a la que podemos trabajar con seguridad:
Clase 00: Uso en instalaciones de hasta 500 V en c.a. y 750 V en c.c.
Clase 0: Uso en instalaciones de hasta 1000 V en c.a. y 1500 V en c.c.
Existen dos tipos de calzado para conectar las personas a tierra, evitando que se carguen electrostáticamente: calzado antiestático y calzado conductor (no destinados a trabajos con electricidad).
Calzado conductor:
Este tipo de Calzado es un EPI de Categoría II.
El calzado conductor tiene una resistencia eléctrica muy baja y se utiliza cuando es necesario minimizar la carga eléctrica acumulada en el menor tiempo posible (por ejemplo, cuando se manipulan sustancias con energía de ignición muy bajas, como ciertos explosivos de alta sensibilidad). Este tipo de calzado no debe llevarse cuando exista riesgo de contacto eléctrico accidental y no es adecuado para uso general. El calzado conductor debe tener un límite superior de resistencia eléctrica de 100 kΩ. de acuerdo con la Norma EN ISO 20344.
Calzado antiestático:
El calzado antiestático tiene un límite superior y otro inferior de resistencia. El límite superior es lo suficientemente bajo como para evitar la acumulación electrostática en la mayoría de las situaciones y el límite inferior con objeto de asegurar alguna protección limitada en caso de defecto de algún equipo eléctrico. El calzado antiestático se debería utilizar cuando sea necesario minimizar la acumulación electrostática mediante la disipación de las cargas, por ejemplo, cuando se trabaje en zonas clasificadas como atmósferas explosivas, pero el riesgo de choque eléctrico no se ha eliminado completamente. Este tipo de calzado es adecuado para uso general.
Este tipo de Calzado es un EPI de Categoría II.
El calzado antiestático presenta una resistencia eléctrica entre 100 kΩ y 1000 MΩ. de acuerdo con la Norma EN ISO 20344
El calzado ESD está destinado para ser utilizado dentro de Áreas de Protección Electrostática (EPA), por ser un calzado con gran capacidad conductora, por lo que evita la acumulación de energía electrostática.
Debido a la alta peligrosidad a la hora de desempeñar este tipo de trabajos, es de vital importancia, realizar la evaluación y prevención de riesgos por personal cualificado, para garantizar y mantener unas condiciones de trabajo seguras, dando prioridad a las medidas de protección colectiva frente a las medidas de protección individual.
Metal Free” está diseñado bajo las exigencias de la EN20345 para calzado de seguridad no utilizando componentes metálicos en su estructura.
Bota soldador “AUGUSTO” S3
Para trabajos relacionados con los procesos de soldadura y técnicas afines con riesgos de salpicaduras de metales fundidos, chispas y proyecciones incandescentes.
Cierre velcro desprendimiento rápido, permite quitar de modo rápido la bota en caso de salpicaduras incandescentes, chispas, etc.
Metal Free” está diseñado bajo las exigencias de la EN20345 para calzado de seguridad no utilizando componentes metálicos en su estructura.
La elección del Calzado de Seguridad debe ser realizada en primer lugar por personal capacitado, y por otra parte, contar con la participación y colaboración del trabajador y siempre seleccionarse según las necesidades profesionales que se vayan a cubrir.